36 PERDIGONES

36 perdigones, un corazón… mi alma se quebró

al escuchar lo que pasó,

me arrebataron a mi primer amor;

36 perdigones, un apagón… no sé qué pasó

en un abrir y cerrar de ojos la nada me consumió

36 perdigones, un grito desgarrador 36 perdigones, no te vayas por favor 36 perdigones, no puedo con este dolor 36 perdigones, así fue como murió…

Sobre el poema:

Como saben, el martes falleció Rosalino Flores (22 años), herido en enero durante una manifestación contra el gobierno en la ciudad del Cusco. Este caso me pareció significativamente cruel y doloroso, ya que le dispararon 36 perdigones, es la personificación del terrible y sistemático abuso policial y violencia desmedida que se produce en las manifestaciones.

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